Continuando con la serie de artículos dedicados a derrotas poco conocidas de Físcher, esta vez es el turno de René Letelier, compatriota chileno de Carlos Jáuregui, pero más conocido que éste, puesto que obtuvo el título de Maestro Internacional, aunque fuera un poco tarde, en 1960 a los 45 años de edad. La victoria de Letelier fue la más famosa de su carrera, y se produjo en marzo de 1959 en la 5ª ronda del Torneo del Mar del Plata, jugado justo un mes antes que el de Santiago de Chile en el que Físcher perdió contra Jáuregui. También cabe señalar que, como luego veremos con más detalle, Físcher podía haber ganado la partida, y, por otra parte, el norteamericano se “vengó” de Letelier venciendo en las tres ocasiones en que volvieron a enfrentarse posteriormente.
Recordemos de nuevo que Físcher no sólo había conseguido su primer título de Estados Unidos a finales de 1957, sino que, con tan solo 15 años, 6 meses y 1 día, había conseguido un extraordinario 6º puesto en el Torneo Interzonal de Portorož 1958 (+6=12-2), obteniendo así una plaza para el Torneo de Candidatos, convirtiéndose en el jugador más joven hasta entonces en clasificarse para un candidatos, y recibiendo directamente el título de Gran Maestro, siendo también el más joven hasta ese momento en lograrlo. Tras el Interzonal y su segundo título de Estados a finales de 1958 (+6=5-0), en los meses previos al Candidatos de Bled/Zagreb/Belgrado 1959, Físcher participó en marzo de 1959 en el Torneo de Mar del Plata que nos ocupa, ya con 16 años (3º-4º con +8=4-2, empatado con Ívkov y por detrás de Nájdorf y Pachman), después en abril en el de Santiago de Chile (donde tan sólo acabó 4º-6º), y finalmente en el de Zúrich en mayo (un torneo más fuerte en el que consiguió un excelente tercer puesto con +8=5-2, empatado con Keres, y tan solo superado por Tal y Glígorić).
Toda una vida delante del tablero: Letelier en 1932 (con 17 años) y en 2004 (con 84).René Letelier Martner
René Letelier Martner nació el 21 de febrero de 1915 en la ciudad chilena de San Bernardo, que en 2017 tenía censados unos 300.000 habitantes. Es capital de la Provincia de Maipo, situada al sur de la capital, lindando con ella y formando parte de la Región Metropolitana de Santiago. Tras toda una vida dedicada al ajedrez, y más de algún que otro apuro económico que le obligó a buscar trabajo en Argentina, falleció a los 91 años de edad en Santiago el domingo 2 de julio de 2006 a las 16:00h.
Aunque la Wikipedia en español apenas dice nada, la de inglés es más extensa y detalla sus resultados más destacados, mientras que la página en ruso incluye un cuadro con sus actuaciones en torneos. Sin embargo, hay una biografía muy completa en este artículo de ChessBase escrito por el maestro e historiador argentino Juan Sebastián Morgado. También hay que mencionar un artículo ilustrado del 3 de julio de 2006, con motivo de su muerte (al parecer extraído del libro homenaje “La Vuelta al Ajedrez en 90 años”, Ángelo Guiñez Jarpa 2005), que apareció en la web de la Federación Nacional de Ajedrez de Chile, pero la web ha desaparecido, aunque todavía se puede leer la página archivada en Internet Archive (claro que no se sabe por cuánto tiempo…).
Según nos cuentan Juan Morgado y Ángelo Guiñez, se sabe que sus padres fueron don Belisario Letelier Rojas y doña Sofía Martner Urrutia, y que fue el menor de 17 hermanos, de los cuales 13 llegaron a edad adulta. Su nombre completo era Sergio René, pero prefirió llevar solamente el de René. Se inició en la práctica del ajedrez en 1927 (a los 12 años de edad), junto con su hermano Gustavo, a raíz de la atracción que el encuentro Capablanca-Alekhine de Buenos Aires ejerció sobre él. Alrededor de 1930 (con 15 años) ya jugaba en el recientemente fundado Círculo de Ajedrez de Providencia, y poco después pasó al Club de Ajedrez Chile, donde ganó el Campeonato de Segunda Categoría con 4 puntos de ventaja.
Participó en muchos campeonatos de Chile, aproximadamente unos 30, el primero en Valparaíso en 1932 con tan solo 17 años, obteniendo un destacado 4º puesto (el vencedor fue Enrique Reed). Dos años más tarde alcanzó el subcampeonato detrás de Mariano Castillo. Precisamente Mariano Castillo y Rodrigo Flores eran los dominadores del ajedrez nacional en aquella época, por lo que Letelier tuvo que esperar a que éstos fueran decayendo en su juego para conseguir el título, nada menos que hasta 1957 (con 42 años), repitiendo victoria en 1960, 1964 y 1973.
En 1936 (con 21 años) comenzó su participación internacional en el Sudamericano de Mar del Plata, donde vence, entre otros, a Jacobo Bolbochán (aunque acabó 11º-12º de 16 con +5=3-7). Al año siguiente el torneo se celebró en Sao Paulo, y Letelier consiguió un excelente 2º puesto (+10=6-2), a tan solo un punto del vencedor, su compatriota Rodrigo Flores.
Abandonó sus estudios de Leyes por su pasión por el ajedrez, al ser invitado en 1938 al Torneo Sudamericano celebrado en el Casino Miramar de Carrasco (Montevideo), donde se enfrentó al mismísimo Campeón Mundial Alekhine, claro que solamente aguanto 25 jugadas (acabó 12º-15º de 16 con una sola victoria, +1=8-6). Sin embargo, parece ser que tras el certamen hubo un torneo rápido (5 segundos por jugada) en el que consiguió vencer a Alekhine, aunque éste se llevó el primer premio, pero Letelier finalizó en un nada despreciable 5º lugar.
En el citado artículo de Juan Morgado, éste lleva a cabo un recorrido por la carrera ajedrecística de Letelier, así que no nos repetiremos aquí.
Cabe mencionar que, aunque quizás sean más meritorias otras actuaciones en supertorneos donde se clasificó detrás de reconocidas estrellas internacionales y excampeones mundiales (destacando Venecia 1950, Mar del Plata 1959, Mar del Plata 1960 o Asunción 1960), la victoria más resonante la consiguió en noviembre de 1954 (con 39 años) en el Torneo Internacional de la UNESCO en Montevideo, donde sólo perdió una partida en la antepenúltima ronda. Acabó con 14,5 puntos de 17 (+13=3-1), medio punto más que Nájdorf y el veterano Ossip Bérnstein, pero venciendo además a ambos. Este éxito le supuso la obtención de una nueva norma de maestro internacional. En esta página de BrasilBase se pueden ver algunas fotos del torneo, y en esta otra el cuadro cruzado .
En su enfrentamiento contra Nájdorf en el torneo, consiguió doblegar la Defensa India de Rey, una partida en la que la osadía del erróneo sacrificio 17.Txh5? ∓0.22 (en vez de ganar un peón con 17.Axb5 +-2.09) obtuvo su recompensa. He aquí la partida con los análisis automáticos de Lichess:
Diez años después, también consiguió superar a Nájdorf en Buenos Aires 1964, quien en una complicada Defensa Siciliana se equivocó muy pronto y ¡fue pulverizado por Letelier en tan solo 18 jugadas! Veamos la partida con los análisis automáticos de Lichess:
Cabe mencionar que Nájdorf y Letelier se enfrentaron en 12 ocasiones, lógicamente con un resultado muy favorable al primero de +9=1-2.
Letelier defendió los colores de Chile en 7 olimpíadas de ajedrez. Entre agosto y septiembre de 1939 (con 24 años) debutó como tercer tablero en la accidentada Olimpiada de Buenos Aires, un certamen descafeinado debido al inminente estallido de la II Guerra Mundial, por lo que no acudieron países como EE.UU., Hungría o Yugoslavia, e incluso después algunos países renunciaron a enfrentarse entre ellos durante la competición. Se jugó una primera fase con 4 grupos formados por 7 países, clasificándose los 4 primeros para la “Final A” y los 3 segundos para la “Final B”. El mayor aliciente fue ver al campeón mundial capitaneando al combinado de Cuba, y a Alekhine encabezando al de Francia, aunque el resto de jugadores de ambas selecciones no estaban ni mucho menos a su altura. Capablanca ganó la medalla de oro en el primer tablero, aunque en realidad Alekhine obtuvo en global mejores números que él (con un +4=2-0 en la fase de grupos frente al +1=4-0 de Capablanca). Pero para las medallas sólo se tenían en cuenta los resultados de la fase final, así que a Capablanca se le contabilizaron +6=5-0 (8,5/11, 77,3%), mientras que Alekhine se quedó con +5=5-0 (7,5/10, 75%). El bronce fue para el letón Petrovs (9,5/13, 73,1%). Aunque las relaciones entre Alekhine y Capablanca ya no eran tan tensas en 1939, Capablanca no se presentó a jugar el encuentro Cuba-Francia de la 12ª ronda, alineando en su lugar a su jugador reserva y dejando a los espectadores con la miel en los labios (el encuentro acabó con empate, con 2 victorias por bando).
En la fase previa Chile obtuvo un excelente tercer puesto tras Letonia y Alemania, clasificándose así para la Final A. Pero ésta ya resultó demasiado fuerte para ellos, acabando en los puestos 12º-13º de 16. Alinearon a Mariano Castillo, Rodrigo Flores Álvarez, Letelier y Julio Salas Romo, con Enrique Reed Valenzuela como suplente. Letelier acabó con un discreto +4=1-8, destacando sus victorias sobre el polaco Paulin Frydman y el lituano Luckis.
En cuanto a la clasificación general, el oro fue para Alemania (Eliskases, Paul Michel, Engels, Becker, y Reinhardt, siendo Eliskases y Becker austriacos, pero Austria había sido anexionada a Alemania), mientras que la plata se la llevó Polonia (Tartakówer, Nájdorf, Paulin Frydman, etc.), a medio punto del oro, y el bronce fue para Estonia (Keres, Ilmar Raud, Paul Schmidt, etc.). Al finalizar el evento, muchos jugadores, sobre todo judíos, decidieron quedarse en Argentina: Nájdorf, Paulin Frydman, Stáhlberg, Eliskases, Becker, Pelikán, Czerniak, Grómer, Séitz, Sonja Graf, etc.
En su 2ª participación, en agosto-septiembre de 1950 (con 35 años), Letelier ocupó también el tercer tablero en la 9ª Olimpiada celebrada en Dubrovnik (Croacia, antigua Yugoslavia). Tan solo participaron 16 selecciones, y Chile alineó a Castillo, Flores, Letelier y Alejandro Maccioni Seisdedos, finalizando en un meritorio 8ª lugar. El oro se lo llevó Yugoslavia (Glígorić, Pirc, Trifunović, etc.), la plata Argentina (Nájdorf, Bolbochán, Guimard, Rossetto y Pílnik) y el bronce la República Federal Alemana (Unzícker, Lóthar Schmid, etc.). Cabe mencionar que la URSS no empezó a participar y arrasar hasta la edición siguiente en 1952 en Helsinki. Letelier obtuvo un resultado de +4=6-5, destacando sus empates con Rossetto y Trifunović.
Olimpiada de Dubrovnik 1950, selección de Chile: Letelier, Castillo, Flores y Maccioni.La 3ª cita olímpica fue en septiembre de 1956 (con 41 años), jugó como segundo tablero en la 12ª Olimpiada que tuvo lugar en Moscú. Se jugó una primera fase con 4 grupos de 8 países, clasificándose los 3 primeras para la Final A, los 3 siguientes para la Final B y los 3 últimos para la Final C. Chile jugó en el Grupo 3, acabando en 5º lugar tras Argentina, Alemania, Inglaterra e Islandia. En la Final B, finalizaron en 10º lugar de los 12 equipos. Alinearon a Flores, Letelier, Walter Ader Hausman y Carlos Jáuregui Andrade, con Héctor Jiménez Rojas y Lionel Mallet de reservas. Letelier acabó con una consistente puntuación de +5=9-3. El vencedor de la olimpiada fue la imbatible URSS (alineando nada menos que a Botvínnik, Smýslov, Keres y Bronstein, con Taimánov y Géller como reservas de lujo), seguida de Yugoslavia (Glígorić, Matánović, Ívkov, etc.) y Hungría (Szabó, Barcza, Benkö, etc.).
Tal como se relata en el obituario de Letelier en la web de ChessBase, el regreso del equipo chileno a su país desde Moscú fue una auténtica odisea: “Hechos muy pintorescos matizaron la concurrencia de Letelier y parte del equipo chileno a ese memorable certamen. En primer lugar, de seis jugadores que componían el equipo, cuatro no tenían asegurados los pasajes de regreso, aunque la Federación Chilena les había garantizado que les serían remitidos en el curso del mes que duraría la competencia. En el ánimo de ahorrar detalles, diremos que los dos jugadores que pagaban la totalidad de sus pasajes, Flores y Ader, emprendieron su regreso tan pronto como hubo finalizado el torneo. Los cuatro restantes tuvieron que viajar a París, por gentileza de la Federación Soviética, a esperar la llegada de los pasajes para volver a Chile. Los jugadores Jáuregui y Jiménez encontraron soluciones particulares a su problema, y regresaron a Chile por sus medios. Quedaban Mallet y Letelier. Los dirigentes cumplieron, aunque nadie imaginó que demorarían cinco meses. Los pasajes en cuestión eran para el buque carguero chileno Aconcagua, que tenía comodidad sólo para diez pasajeros. El Aconcagua, después de estar diez días en proceso de desratización en el puerto de Hamburgo, zarpó hacia Valparaíso. El viaje demoró unos 45 días”.
En 1960 (con 45 años), en su 4ª participación olímpica y habiendo obtenido el título de Maestro Internacional, defendió el primer tablero en la 14ª Olimpiada en Leipzig (Alemania) . La fase previa constó de 4 grupos de 9 equipos cada uno, clasificándose en grupos de 3 para las finales A, B y C respectivamente. Encuadrada en el grupo 4, la selección chilena alineó a Letelier, Eugenio Larraín Cadiz, Hausman y Romo, con Rojas como suplente, acabando en el 5º puesto detrás de Estados Unidos, Alemania Occidental (RFA), Rumanía y España. A destacar en esta fase que Letelier se volvió a encontrar con Físcher en la 8ª ronda, su cuarto y último enfrentamiento, y fue pulverizado tras aceptar la provocación de Físcher en la India de Rey con 4…0-0, siguiendo con 5.e5?!, como comentaremos más adelante.
Chile tampoco tuvo una buena actuación en la Final B, acabando el puesto 10º de las 12 selecciones. Sin embargo, Letelier acabó con un destacable +7=8-4, sobresaliendo sus victorias contra O’Kelly y Ghitescu, así como un empate contra Stáhlberg.
Como de costumbre, el campeón de la olimpiada fue la URSS (con 4 campeones o futuros campeones mundiales en sus filas: Tal, Botvínnik, Keres, Korchnói, Smýslov y Petrosián), seguida de Estados Unidos (Físcher, Lombárdy, Byrne, Bisguier, Rossolimo, Wéinstein), y Yugoslavia (Glígorić, Matánović, Ívkov, Bertok, Damljánović, Vúkčević).
En su 5ª participación olímpica en 1964 (con 49 años), Letelier volvió a defender el primer tablero en la 16ª Olimpiada celebrada en Tel-Aviv, en la que participaron nada menos que 50 países. La fase previa estuvo dividida en 7 grupos con 7 países cada uno, salvo el último grupo con 8. En cada grupo los 2 primeros iban a la Final A, los 2 siguientes a la Final B, los 2 siguientes a la Final C y el resto a la Final D. Encuadrada en el Grupo 1, Chile quedó en 4º lugar detrás de la URSS, España y Filipinas. En la final B acabó en 10º lugar de las 14 selecciones. El equipo chileno estaba formado por Letelier, Hausman, Pablo Nicolás Vergara y Jáuregui, con David Godoy Bugueño y Alejandro Espinoza como suplentes. Letelier terminó con un +4=5-7, claro que en la fase de grupos encajaron un 4-0 contra la todopoderosa URSS y sólo consiguieron unas tablas contra el fuerte combinado español.
La URSS se llevó el oro sin muchos esfuerzos, alineando de nuevo a 4 campeones o futuros campeones mundiales en sus filas: Petrosián, Botvínnik, Smýslov y Keres, con Stein y Spássky como suplentes. Yugoslavia repitió plata (Glígorić, Ívkov, Matánović, Parma, Udovcić, Matúlović) y el bronce fue para Alemania (Unzícker, Darga, Smith, Pfléger, Mohrlok, Bialas), que inesperadamente desbancó de la 3ª plaza a Hungría (Pórtisch, Szabó, Bilek, Lengyel, Forintos, Flesch), por tan solo medio punto, con una dramática última ronda entre ambos en la que los húngaros vencieron por 2,5-1,5, pero no fue suficiente para alcanzarles en la clasificación.
En su 6º cita olímpica en 1966 (con 51 años), Letelier jugó una vez más como primer tablero en la 17ª Olimpiada que tuvo lugar en La Habana. Se jugó con el mismo formato de la edición anterior. Chile alineó a Letelier, Larraín, Rojas, Claudio Orpinas, la jugadora Berna Carrasco Araya, y Pablo Vergara. La actuación chilena no fue buena, puesto que en el Grupo 4 acabaron penúltimos de 7 equipos, y en la floja Final C tan solo consiguieron el 10º puesto de las 14 selecciones. Letelier acabó con un discreto +4=7-6.
En la Final A la URSS se llevó el oro (Petrosián, Spássky, Tal, Stein, Korchnói, Polugaévsky), Estados Unidos la plata (Físcher, Byrne, Benkö, Evans, Addison, Rossolimo), y Hungría el bronce (Pórtisch, Szabó, Bilek, Lengyel, Forintos, Bárczay), aunque por mejor desempate que el equipo de Yugoslavia (Glígorić, Ívkov, Parma, Matánović, Matúlović, Čirić).
Finalmente, su última participación tuvo lugar en 1974, ya con 59 años y cuando su nivel ya no era el mismo, ocupando el cuarto tablero en la 21ª Olimpiada celebrada en Niza (Francia). Acudieron nada menos que 74 selecciones, y la fase previa estaba formada por 8 grupos de 9 o 10 equipos cada uno, clasificándose para las finales de 2 en 2. Chile terminó 5ª en el Grupo 4, y en la Final C tuvo una buena actuación, finalizando en 6º lugar a poca distancia de los puestos anteriores. Alinearon a Carlos Silva Sánchez, Pedro H. Donoso Velasco, David Godoy Bugueño, Letelier, Moisés Stekel Grunberg, y César Velásquez Ojeda. Letelier solamente jugó 8 partidas, con un discreto resultado de +3=1-4.
La medalla de oro de la olimpiada se la llevó una vez más la URSS (Kárpov, Korchnói, Spássky, Petrosián, Tal, Kuzmín), con una amplia ventaja sobre Yugoslavia (Glígorić, Ljubójević, Ívkov, Pláninc, Velimírović, Parma), mientras que Estados Unidos (Kaválek, Byrne, Browne, Reshévsky, Lombárdy, Tarjan) consiguió un meritorio bronce sin la presencia del vigente campeón Físcher, desaparecido desde que terminó su match con Spássky en Reikiavik.
Memorial Capablanca, La Habana 1971, Ronda 7: Letelier-Velimírović (0-1 en 56 jugadas).Posteriormente participó en 1977 (con 62 años) en el Abierto de La Falda (Córdoba, Argentina), donde aparece con un Elo de 2310. En 1980 (con 65 años, 2325 Elo) finaliza último en el Magistral de Santiago de Chile, con tan solo +1=1-7. En 1984 (con 69 años, 2275 Elo), termina 8º de 10 jugadores en el Magistral de Casilda (Santa Fe, Argentina), con +2=5-3. Y de nuevo finaliza último en Mar del Plata 1990 (con 75 años y 2285 Elo, +1=2-6).
Letelier siguió participando en los campeonatos de Chile, en torneos organizados en Santiago y en el abierto de Mar del Plata hasta 1999, ya con 84 años. A lo largo de toda una vida dedicada al ajedrez, se midió a campeones mundiales como Alekhine, Botvínnik, Smýslov, Tal, Petrosián, Spássky y Físcher, así como a otros grandes maestros de renombre histórico, destacando Keres, Korchnói, Bronstein, Pórtisch, Larsen, Taimánov, Pachman y Nájdorf, luchas desiguales en la que puso su máximo empeño en demostrar sobre el tablero toda su sabiduría ajedrecística.
Letelier aparece en Chessmetrics con un pico de Elo de 2461 en diciembre de 1954, a los 39 años de edad, situándose en el puesto nº 86 del mundo, aunque en diciembre de 1953 aparece en el puesto nº 84 con 2443 Elo. En Chessgames se pueden encontrar nada menos que 679 partidas suyas.
A lo largo de su carrera también escribía habitualmente en columnas ajedrecísticas de la prensa de Santiago, y publicó varios libros, que, por desgracia, no han tenido demasiada difusión: “Ajedrez: Arte y Ciencia”, Ed. Salesianos 1975; “El Ajedrez Chileno en Salónica, 1984”, Santiago 1985; “Torneo Magistral de Quilmes 1945”, 1983.
También existe un libro dedicado a Letelier, titulado “La vuelta al ajedrez en 90 años”, Ángelo Guiñez Jarpa, Fundación Chilena de Ajedrez 2005. Se puede acceder a la vista previa del libro en Google Books. Letelier aparece de nuevo en el libro del mismo autor titulado “El Ajedrez en Chile”, Fundación Chilena de Ajedrez 2009.
El Torneo de Mar del Plata 1959

El 22º Torneo Internacional de Ciudad de Mar del Plata se celebró del 23 de marzo al 10 de abril de 1959. En él participaron 15 jugadores, destacando por supuesto la presencia del joven campeón estadounidense Bobby Físcher, acompañado de tres grandes maestros: el argentino Nájdorf, el checo Pachman y el yugoslavo Ívkov.
El brillante vencedor fue Nájdorf (+7=7-0), empatado a puntos con Pachman (+8=5-1), mientras que Ívkov (+7=6-1) y Físcher (+8=4-2) empataron en los puestos 3º y 4º a medio punto del vencedor.
Físcher realizó un buen papel, y fueron sus dos derrotas contra Pachman y Letelier las que le impidieron llevarse el torneo, puesto que ganó sus partidas contra casi todos los jugadores clasificados por detrás de él. Aparte de la derrota contra Letelier, tan sólo el colombiano Luis Augusto Sánchez y el argentino Jaime Emma consiguieron arrancarle unas tablas.
Tal como mencionamos anteriormente, éste es uno de los casos en los que la actuación de Letelier (+7=4-3) puede considerarse un gran éxito, puesto que acabó en el 5º puesto con 9 puntos, justo detrás de los principales favoritos a tan solo un punto del tercer y cuarto clasificado, y a 1,5 puntos de la cabeza. Sólo perdió contra Pachman, Ívkov (a quien había ganado un mes antes en el Torneo de Santiago, a pesar de que Letelier tuvo una mala actuación) y Sanguinetti, entablando con Nájdorf y venciendo, además de Físcher (aunque fuera con bastante suerte), a otros destacados y conocidos maestros argentinos como Rossetto, Bolbochán o Pílnik. Por si fuera poco, obtuvo la definitiva norma necesaria para que la FIDE le otorgara el título de Maestro Internacional.
En primer término, Letelier y el joven Físcher conversan uno frente a otro, tal vez en la ceremonia de clausura del torneo.La partida
La victoria de Letelier sobre Físcher fue sin duda la más famosa de toda su carrera, aunque también hay que decir que Físcher estuvo presionando casi toda la partida y en un momento dado pudo incluso haber ganado. Pero Letelier luchó de principio a fin durante 61 jugadas, y aprovechó un grave error en el final de su joven y fuerte rival para anotarse el punto.
Éste es el gráfico de Lichess de la evolución de la partida:

Se planteó la Variante Cerrada de la Apertura Española, siguiendo los cauces de la clásica Defensa Chigorin, y podemos asegurar que Letelier sufrió en sus propias carnes lo que significa enfrentarse a la llamada “Tortura Española”. Aunque las negras, en teoría, igualaron fácilmente tras el cambio de peones de Físcher en el centro (15.dxe5!?), lo cierto es que el ataque temático de las blancas en el flanco de Rey con 16.Ch2, 17.Df3, 18.Chg4, 19.Cd5 y 20.h4, puso en graves aprietos a las negras, dando incluso la impresión de que se perdían varios peones tras los escarceos tácticos en e4 y f7.
Pero Letelier se defendió con acierto, llegando al cambio de damas en la jugada 32 y quedando con un peón menos que, según Stockfish, no era lo suficientemente importante como para que las blancas albergaran opciones de victoria.
Claro que la percepción delante del tablero siempre es distinta y Físcher, con peón de ventaja, lógicamente siguió jugando a ganar, lo que bien podía haber ocurrido tras la errónea defensa 38…Rf7??, pero las blancas no encontraron la jugada exacta 39.Cd8+!!. Además de eso, las negras lograron recuperar el peón, llegando a un complejo final de Alfil contra Caballo con mayorías de peones para ambos bandos en flancos opuestos.
En posición teórica de igualdad, Letelier volvió a equivocarse con 44…g6??, y esta vez Físcher parecía que iba por buen camino con el cambio del Alfil por el Caballo, pero de nuevo falló y dejó escapar la victoria con 47.a4??, seguramente con ambos rivales en apuros de tiempo.
El error definitivo de Físcher llegó con 55.c5??, cuando otras jugadas como 55.g6, 55.Rf6 o 55.Re6 deberían haber conducido a las tablas al coronar ambos bandos sus peones al mismo tiempo.
Letelier consiguió coronar el suyo un tiempo antes y, basándose en algunos detalles tácticos, fue capaz de detener el avance de los dos peones pasados pero aislados de Físcher, lo que obligó a éste a firmar la capitulación. ¡Una auténtica lucha sin cuartel!
Cabe añadir que Físcher y Letelier se enfrentaron en otras 3 ocasiones después de esta partida, y el norteamericano ganó con claridad en todas ellas.
La primera fue al mes siguiente en la 7ª ronda del Torneo de Santiago de Chile. Repitiendo colores, Físcher debió estudiar a fondo su partida de Mar del Plata, ya que siguieron la misma variante de la Apertura Española, pero se desvió en la jugada 15 manteniendo la tensión central con 15.Ad2 (en vez de cambiar peones con 15.dxe5). Las negras se equivocaron rápidamente con 15…Tab8?! y 16…Cc6?, perdieron calidad y ya no pudieron hacer nada.
Un año después, en abril de 1960, Letelier y Físcher coincidieron de nuevo en la 14ª ronda de Mar del Plata, esta vez con colores cambiados. Letelier quiso sorprender a Físcher con el ataque Trompówsky (1.d4 Cf6 2.Ag5), y Físcher respondió con la activa 2…c5. Las blancas jugaron tímidamente y propusieron un rápido cambio de damas en el que perdieron un peón. Aunque las negras quedaron con 2 grupos de peones doblados, también conservaron la pareja de alfiles, y finalmente las blancas se equivocaron yendo con su torre a por el alejado peón de h6, permitiendo a las negras penetrar con la suya por la columna ‘c’, creando fuertes amenazas contra el rey blanco que llevaron a una rápida victoria.
Por último, en octubre de 1960 se enfrentaron en la 8ª ronda de la fase previa de la Olimpiada de Leipzig, nuevamente Letelier con blancas. Se planteó la Defensa India de Rey, retrasando Físcher el avance 4…d6 y jugando 4…0-0, una provocación en la que Letelier cayó, y tras 5.e5?! las negras entregaron un peón a cambio de contrajuego. Después Letelier se equivocó con 10.Ce4?, que le dejaba en clara desventaja. Siguieron algunos errores más y las blancas quedaron rápidamente perdidas con el rey en el centro, siendo pulverizadas en tan solo 23 jugadas con un bonito sacrificio de Dama en f4. Físcher incluyó esta partida en “Mis 60 mejores partidas”, pero claramente no indicó todos los errores de las negras… ni de las blancas…
A continuación incluyo la partida extensamente analizada con Stockfish 17.1 en un AMD Ryzen 9 5900X (3,7 GHz, 12 núcleos, Tablas Hash de 1GB).
En cuanto hagáis clic en una jugada aparecerá el tablero, que podréis mover a donde menos estorbe (debajo del tablero tenéis un botón para girarlo, y otro para descargar la partida en formato PGN).
Espero que os haya gustado. Saludos. ![]()



