El vuelo de las Hadas

Displicente Luna
acarreando informes voces
trepando escaleras sin fin
mientras siembra amores sibilantes,
catástrofes, cánticos y todas
las Hadas transformando [van]
la ilusión que su tenue luz proyecta
Maravillosas formas concertadas
en tan sublime fin
de realización bella
Cósmico paraje de miles de formas
manifestando sus increíbles colores,
cambiantes, etéreos, sublimes
Odiado amor y triste felicidad
que a la ansiada cima nos conduces
Recordando a William Shakespeare
con el vuelo de sus hermosas Hadas
el mundo todo vuelve a tener color
y el Amor vuelve a ser Eterno
Majestuoso y sublime acto
que ennoblece el Universo
en su sempiterna gracia,
Para una vez más
apreciar la ternura majestuosa del viento,
con el siempre tenue
y eterno vuelo mágico de las majestuosas Hadas,
que iluminan y guían con su colorido brillo,
el amoroso sueño del Peregrino.
Con su inagotable Amor Mágico
y sus bellos cánticos, tenue melodía,
que llena el espacio y lo transforma
en serena brisa cuyo floral perfume
nos calma y llena de amorosa paz.
Cuando veo una genialidad en mí,
Recuerdo ser sólo un personaje
en un drama que no entiendo
Dispuesto para un fin que mi condición ignora
Creemos crear y somos creaciones.
Desafío ahora al Autor de este inútil Vacío
Exhorto al mismo Olimpo
a arrojarme sus furiosos Rayos
Y entrego a las bellas Hadas
este guion que será quemado
en el infernal fuego gélido
del odioso Amor que al Paraíso innunda.
Tal resulta ser, según cuentan,
el poderoso vuelo de las Hadas.
Horacio Kiel
(13 de agosto de 2020)
Dedicado a William Shakespeare (1564-1616)